El estrés es una reacción fisiológica y psicológica del organismo para afrontar una situación que se percibe como amenazante. Esta respuesta se produce cuando la persona siente que está en peligro. Cuando el detonante del estrés es el trabajo, se denomina estrés laboral.
Está asociado, entre otros aspectos, a la liberación de la hormona adrenalina, y prepara al organismo para la lucha o la huida:
- Los músculos se activan.
- Aumentan las frecuencias cardiaca y respiratoria.
- Se favorece la llegada de oxígeno a las células.
- Se mejora la cantidad de energía disponible para poder afrontar, con mayor éxito, esta la situación de peligro.
Esta reacción se produce de la misma forma con independencia de la causa que lo produzca. A cualquier tipo de estímulo capaz de generar una percepción de peligro en el organismo se le denomina estresor o factor estresante.
Esta activación no tiene, en sí misma, un carácter negativo; de hecho, ayuda a los animales a la supervivencia. El problema se produce cuando un organismo se enfrenta a menudo o de forma continuada en el tiempo a una situación de estrés.
Proceso de apreciación del estrés
Ante un estresor, el individuo realiza una valoración entre la magnitud del peligro que le amenaza y el conjunto de estrategias y capacidades que posee para afrontarlas.
- Si la persona “aprecia” que no tiene capacidades y recursos necesarios para enfrentarse a este peligro potencial, se produce una emoción dolorosa ante la incapacidad de afrontamiento, promoviéndose un desequilibrio emocional y fisiológico llamado estrés.
- Por el contrario, si el individuo siente que tiene capacidad para resolver el problema al que se enfrenta, evalúa y decide, entre las posibles alternativas de respuesta, aquélla que va a contrarrestar los efectos negativos de la situación percibida.
En el proceso de apreciación influyen una serie de factores, entre los que cabe mencionar:
- El grado de exactitud en la apreciación del peligro (pues se puede sobredimensionar el peligro real de la supuesta amenaza).
- La formación y experiencia del sujeto.
- Las propias capacidades innatas del sujeto.
- La dificultad de la tarea a realizar.
Principales factores del estrés laboral
Los principales estresores laborales son muy diversos:
- La sobrecarga de trabajo.
- La infrautilización de habilidades.
- Un ritmo de trabajo excesivo.
- Un horario de trabajo inadecuado.
- La ambigüedad de rol y el conflicto de rol.
- Las malas relaciones personales.
- La violencia y el acoso en el trabajo.
- La inseguridad en el trabajo.
- La imposibilidad de promoción profesional.
- La falta de participación en las decisiones de la empresa.
- El control excesivo y la supervisión.
- La falta de formación, entrenamiento o aclimatación previa al desempeño de una determinada tarea.
- El exceso de responsabilidad.
- El trabajo en un contexto físico que sea molesto o peligroso.